En un pueblo llamado Fornidar, está la famosa agencia de espías “Pio-Pillo”, está formada por unos cinco pajaritos que están dispuestos a realizar trabajos de alto riesgo a cambio de una jaula acondicionada, comida de alto Stan Ding y algo de dinero. A pesar del dineral que te puede costar si los contratas los resultados son magníficos.
Os voy a contar la historia de una señora del pueblo cuyo nombre es Mª Dolores ( Lola).
Que contrato la agencia “Pio-Pillo” por que decía que su marido le engañaba con la vecina de enfrente.
Un viernes a primera hora, Lola entra en la agencia, como no veía a nadie pego un grito seco y los pobres pajaritos se despertaron al instante.
Con mala cara y con unas ojeras que les llegaban al suelo los pajaritos recibieron a Lola en su despacho. Lola les explico la situación, pues que su marido había veces que no dormía en casa y la vecina de enfrente tampoco , que no le parecía normal que la vecina trajera tapers o tuperbares a su casa y solo fueran para su marido o que todas se llamaran. Los pajaritos un poco dormidos tomaron nota y le dijeron a Lola que hoy mismo comenzarían a trabajar, ¡PERO A UNA HORA MÁS CONVENIENTE ¡
A las 8:00 PM los pajaritos camuflados entre los árboles de la plaza donde vive Lola y su marido, el individuo que los pajaritos tienen que espiar que por razones personales no puedo revelar sus datos.
Los pajaritos cuando el coche se puso en marcha saltaron del árbol al techo del coche del anónimo, y estos lo persiguieron hasta que aparco en el garaje de la empresa donde él trabaja.
A continuación cuando susodicho se marchó los pajaritos entraron en acción. Estuvieron observando al individuo en toda jornada laboral y no ocurrió nada fuera de lo normal. A la vuelta a casa al individuo paro en una gasolinera y entonces decidieron intervenir e perseguirlo.
Uno de los pajaritos entro al baño donde se encontraba el anónimo, pero derepente el pajarito salió corriendo del baño y todos le siguieron asustados. Al mirar atrás se dieron cuenta individuo también salía del baño, estos se asustaron aún más.
Cuando ya todos llegaron al coche y este se puso en marcha, todos los pajaritos le preguntaron al que había entrado al baño con mucha intriga, que si había descubierto algo para poder contárselo a Lola, y el muy satisfecho dijo que si, que el susodicho hizo una llamada a una mujer que no parecía ser Lola y que no pudo descubrir nada más por que todo pasó muy rápido , las caras de satisfacción de los pajaritos fueron recayendo.
Al crepúsculo los pajaritos y M ª Dolores quedaron en el tendedero de esta y los pajaritos le comentaron lo que habían sacado de su marido, ella dijo que todo esto finalizara al día siguiente, los pajaritos asintieron.
Al día siguiente los pajaritos se despertaron muy temprano para cumplir con su deber. Afirmar lo que decía Lola era lo principal.
Siguieron paso a paso todo lo que hicieron el día anterior. Al instante sucedió algo un tanto extraño, que solo estuvieron un cuarto de hora en su lugar de trabajo (del anónimo)
Y no volvieron a casa, si no a un restaurante Italiano en el cual quedo con una mujer que encajaba con la descripción de Lola hacia su vecina, también iba un poco camuflada. Les hicieron un par de fotos y por la tarde quedaron con Lola para entregárselas.
Los pajaritos le preguntaron si esta era la mujer de la que sospechaba y efectivamente si era esa mujer.
Por la noche mientras cenaban M ª Dolores y su marido ella le comento que ya sabía que le estaba engañando con otra y que quería explicaciones y el le contestó que como lo había descubierto y ella contesto es que… ¡Me lo dijo un pajarito!
Me ha gustado mucho, sobre todo el juego de palabras.
ResponderEliminarEs muy gracioso y me parece muy original que los detectives fueran pajaritos
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